18 octubre 2006

Firmes!!! O cómo mejorar la rigidez de la bici

Al principio, los ejes de las ruedas de nuestras mtb se apretaban por medio de una tuerca a cada lado del eje, pero para los frecuentes pinchazos que se producen en nuestra modalidad, se mostró muy poco práctico, por lo que los fabricantes diseñaron un nuevo tipo de eje que permitiera apretar y soltar la rueda sin ninguna herramienta. Entonces nacieron los ejes de cierre rápido.

Pero esos ejes no sólo sirven para sujetar la rueda al cuadro o a la horquilla, sino también cierran el paralelogramo formado por la horquilla o el basculante trasero, por lo que si este eje de cierre rápido no está lo suficientemente apretado, la rigidez de nuestra bici se puede asimilar a la de un chicle de fresa ácida y perder así precisión en nuestras trayectorias.

En este post os comentaré cual es la mejor forma de montar y apretar vuestras ruedas.

En primer lugar habréis de decidir en qué lado de la rueda colocar la palanca de cierre. Con la proliferación de los discos de freno, hay gente que para evitar quemarse con el disco a la hora de desmontar la rueda, monta las palancas en el lado derecho de la bici, pero en el eje trasero os encontráis que en ese lado está el desviador trasero y puede llegar a interferir con la palanca una vez cerrada. Entonces podréis colocar en la rueda delantera la palanca a la derecha y en la trasera a la izquierda. Así los tengo yo.

Otros aconsejan, y únicamente por razones estéticas, colocar los dos a la izquierda. Si en alguna bajada pincháis, en el tiempo en que bajáis de la bici y sacáis la cámara, el disco ya se ha enfriado y ya no tenéis peligro de quemaros.

Ahora habréis de comprobar que los ejes rápidos están bien montados, con una arandela de apoyo y un muelle cónico, con la parte de mayor diámetro en contacto con la arandela (hacia el exterior), a cada lado de la rueda. No está de más que pongáis una ligera capa de grasa en la zona de rozamiento de cada arandela y que previamente hayáis recubierto con otra fina capa el eje, para así protegerlo de la corrosión. Este pequeño mantenimiento os lo recomiendo cuatro veces al año.

Otro consejo: si tenéis que comprar un eje de cierre nuevo, no elijáis los que tengan arandelas de plástico. Estas se suelen deformar rápidamente con la fuerza de cierre y con los discos de freno y la temperatura que estos generan, se suelen fundir. Elegid mejor aquellos ejes que tengan arandelas de metal (Acero, aluminio, cobre…).

Al montar la rueda en la bici, no lo hagáis cuando la bicicleta está al revés (típica posición en el monte cuando se ha reparado un pinchazo) o cuando está la bici colgada en un banco de reparación. En esos casos la rueda no está sometida a peso y podéis fácilmente montarla torcida. La mejor posición es con la rueda en el suelo y la bici encima, a ser posible sobre una superficie horizontal, realizando un poco de presión con vuestro peso, encima de la bici. Hay que asegurarse que la rueda esté bien centrada, para evitar roces entre los discos y las pastillas.

Apretad la tuerca hasta que esté ligeramente fija en contacto con el cuadro y entonces podéis cerrar la palanca. La fuerza con la que debe quedar cerrada es la máxima que luego os permita abrir el cierre sin utilizar ninguna herramienta, sólo con la mano.

Este es uno de los factores que indican si un cierre rápido es bueno o no. A parte de otros detalles como precio, estética o peso, también deberíamos tener en cuenta la relación entre la fuerza que hay que aplicar para cerrarlo y la fuerza de apriete que queda en el eje. Para una misma fuerza de aplicación con la mano, cuanto mayor sea la fuerza que quede en el eje, mejor será el cierre rápido. Por desgracia este valor sólo lo podemos encontrar en revistas del sector extranjeras. Cero que las españolas, por desgracia, no saben lo que es un dinamómetro y menos cómo se utiliza. (Tómese, por favor, cómo crítica constructiva).

Ahora nos queda la duda de dónde ha de quedar la palanca al cerrarla. Pues bien, siempre ha de estar muy cerca del cuadro o de la horquilla de manera a evitar que cualquier enganchón con una rama, una piedra u otro ciclista nos abra el cierre rápido (peligro de accidente). Os recomiendo en la rueda delantera, dejarlo paralelo a la horquilla, y en la trasera, escondido entre vaina y tirante. Pero siempre de forma que podáis utilizar dos dedos para abrir el cierre rápido. Eso si evitad que entre en contacto con el cuadro, para eliminar posibles arañazos.

Ah! Hablando de cierres rápidos, se me olvidaba un tercero que casi todos tenéis en la bici: el de la tija del sillín. En este también son válidos los consejos en cuanto a fuerza, pero además tiene otro pequeño detalle: Siempre debe coincidir la abertura (raja) que tenéis en el tubo vertical con la abertura del cierre. Y otro truco: Es muy recomendable engrasar con una fina capa la parte de la tija del sillín que queda dentro del tubo vertical, con ello eliminaréis ruidos y evitaréis, aquellos que tengáis tijas metálicas, que se corroan y se suelden al tubo vertical.

3 comentarios:

Windsgurú dijo...

Excelente post. He descubierto tu página por casualidad (buscando consejos para la correcta limpieza de la bici), y me parece muy buen blog. Continuaré explorándolo.
Además, cosa que no es frecuente, no hay faltas de ortografía... y eso, es de agradecer.
Enhorabuena

Unknown dijo...

Muy bueno el blog y la nota....
Tengo una gran duda si dejó la palanca de bloqueo apuntando hacia el suelo es correcto????(aunque esta este apretada)

Una señora me dijo que siempre la palanca de bloqueo va hacia arriba nunca apuntando hacia abajo por que se afloja...¿esto es verdad?

Alguien que me pueda ayudar???

François dijo...

Es correcto, pero por una sencilla razón: Si la apretas hacia arriba y por vibraciones se suelta, veras la palanca por gravedad apuntando hacia abajo. Así con un simple vistazo a la bici podrás ver si los ejes de rueda están bien apretados o no: Todas las palancas que apuntan hacia arriba o en horizontal indican que el eje está apretado. En cuanto una palanca apunte hacia abajo, es clarro signo de que se ha aflojado.